¿Necesitas mantener los rótulos exteriores de tu negocio en óptimas condiciones? Sabemos que puede ser una tarea complicada, pero estás en el lugar correcto. 

En este artículo, te proporcionaremos información valiosa para realizar un mantenimiento preventivo y limpieza de tus rótulos exteriores.

¿Cuál es la mejor opción, prevenir o curar?

Es indudable: realizar un mantenimiento preventivo antes que correctivo es lo ideal. De hecho, al hacer un mantenimiento periódico de tu rótulo comercial exterior, se pueden evitar futuras reparaciones y costes innecesarios

De esta forma, se logra una mayor durabilidad y un óptimo funcionamiento en todo momento. Además, desde un punto de vista económico, siempre resulta más costoso hacer una reparación que una revisión preventiva.

El mejor mantenimiento posible

Los rótulos exteriores juegan un papel fundamental en la estrategia de marketing de las empresas, por lo que deben mantenerse en óptimas condiciones para captar la atención de los clientes.

La frecuencia de mantenimiento y limpieza del rótulo puede variar según su tipo y las condiciones ambientales a las que esté expuesto. Sin embargo, en general, se recomienda realizar un mantenimiento cada cuatro años y una limpieza al menos una vez al año.

Para comenzar, es importante realizar una evaluación exhaustiva del estado actual del rótulo:

  • La integridad de la estructura que lo sostiene. Es fundamental inspeccionar la estructura y verificar si presenta oxidación; se recomienda realizar la revisión cada 5 años. 
  • Mecanismo de iluminación. Se sugiere revisar las fuentes de iluminación en un intervalo de 4 años aproximadamente. En Rótulos LED, cada 2.
  • Las letras corpóreas. Es necesario reemplazar letras que se encuentren dañadas.
  • La pintura. En casos en que la pintura esté deteriorada, se debe proceder a una renovación adecuada.
  • La limpieza. Las inclemencias del tiempo y la suciedad hacen que sea recomendable realizar la limpieza anualmente. 

Limpiando tú mismo

Si decides limpiar el rótulo por ti mismo, te proporcionamos algunos consejos útiles:

  • En los casos en que el rótulo tenga iluminación, desconecta la iluminación del mismo.
  • Evita siempre el uso de productos abrasivos, ya que pueden dañar la calidad del material o la pintura del rótulo.
  • Lo más adecuado para eliminar la suciedad es utilizar un paño de algodón con agua tibia y jabón neutro para evitar rayar la superficie.

A continuación, se indican las mejores formas de limpiar según el material del rótulo:

  • Acero inoxidable: Utiliza productos desengrasantes para limpiar el acero inoxidable.
  • Latón y cobre: Son materiales que suelen llevar un barniz como protección, por lo que se recomienda limpiar con jabón neutro y algún paño húmedo. Si no vienen con el mencionado barniz de protección, se puede pulir.
  • Aluminio: Este se trata con pintura para metales. Por eso es necesario limpiar con jabón neutro y agua. Frótese con precaución, el aluminio es fácil de rayarse.
  • Metacrilato: El metacrilato puede llegar a ensuciarse con facilidad, lo que afecta la iluminación. Para limpiarlo, utiliza agua con jabón neutro.
  • PVC: Como el PVC suele estar pintado, se limpia con agua y un jabón neutro.